Activistas de la organización ecologista Greenpeace bloquearon este martes la línea férrea en las inmediaciones de la central, en la localidad de Karlsruhe, para evitar el traslado de 140 cajones con acero y mezcla de vidrio radiactivo en cinco contenedores, sustancia denominada sopa nuclear por los ambientalistas.
Los manifestantes, algunos encadenados a la entrada de la planta, exigieron almacenar los residuos líquidos fisibles en un repositorio nuclear, en lugar de reciclarlo.
Alertan que la transportación a un sitio provisional en Lubmin acarreará daños ambientales incalculables.
En Wittenberg, los pobladores han colgado cruces de madera en amarillo, como símbolo del movimiento antinuclear, en protesta por el paso del convoy con destino al estado de Mecklemburgo-Pomerania occidental, en el norte de Alemania, previsto para el miércoles.
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