RECETAS PARA EL 3º MUNDO EN EUROPA??

polémica sugerencia de legisladores alemanes en medio de la crisis

¡Vendan las islas, griegos en bancarrota!

El diario Bild, el más popular de Alemania, reprodujo el reclamo, un día antes de que la canciller Angela Merkel se reúna con el primer ministro griego. El archipiélago del Mar Egeo cuenta con 2.000 islas, de las cuales sólo 200 están habitadas.

El diputado liberal Frank Schanffler y el cristianodemócrata Josef Schlarmann, presidente de la asociación conservadora para pequeñas y medianas empresas, recomendaron a Atenas desprenderse de algunas de sus islas para hacer frente al grave endeudamiento del país, según el diario alemán Bild. “¡Vendan sus islas, griegos en bancarrota!”, fue el titular de ayer del matutino.

“El Estado griego debe desprenderse de forma radical de sus participaciones en empresas y también vender terrenos como, por ejemplo, sus islas deshabitadas”, sostuvo Schanffler, miembro de la comisión parlamentaria de finanzas. El liberal argumentó en el rotativo, además, que la canciller Angela Merkel “no debe prometer ayudas” a Grecia.

La canciller cristianodemócrata se reunirá hoy en Berlín con el primer ministro griego, Georgios Papandreou, en un encuentro en el que se abordará la situación financiera de Grecia. Asimismo, los dos principales sindicatos del país heleno convocaron para hoy manifestaciones masivas y una huelga de tres horas en protesta por los programas de austeridad del gobierno en Atenas. Está previsto que los medios de transporte público suspendan el servicio y los controladores aéreos anunciaron un cese de su actividad de dos horas, por lo que serán cancelados varios vuelos y otros serán retrasados.

Papandreou, puede esperar como máximo una palabra de apoyo a sus medidas de austeridad en su reunión con la canciller alemana y un compromiso privado de que Alemania ayudará a su país si es necesario. Pero no un desembolso concreto de fondos.

Merkel enfrenta la difícil tarea de convencer a los alemanes de que Berlín podría tener que ayudar a rescatar a Grecia, que necesita conseguir 53.000 millones de euros este año para financiar sus obligaciones de deuda y cubrir su enorme déficit presupuestario.

Los ingresos promedio de los alemanes cayeron en el último año por primera vez en la historia moderna y Merkel ha incrementado la edad de retiro a 67 años desde los 65.
La canciller también enfrenta una fuerte oposición de su aliado en la coalición de gobierno, el partido FDP, cuyo líder ha presionado a Atenas para que adopte mayores medidas para salir de su crisis fiscal.

Un reciente sondeo de opinión mostró que la mayoría de los alemanes quiere que Grecia sea expulsada de la zona euro si es necesario, y más de dos tercios se oponen a entregar a Atenas miles de millones de euros en créditos.

La sugerencia de los alemanes tiene algo de asidero. De las 2.000 islas donde viven 1,3 millones de habitantes, sólo unas 200 están habitadas.

En medio del mar Egeo, son parte fundamental de la cultura griega y fuente clave de ingresos al país. Las más famosas son Milos, Kea, Mykonos y las volcánicas de Santorini, entre otras.

Mientras tanto, Atenas aprobó un plan de ajuste con el que pretende ahorrar unos 4.800 millones de euros para sanear la maltrecha economía griega, que acumula ya una deuda de más del 110 por ciento del PBI y un déficit del 12,7 por ciento.

A pesar de la incertidumbre, colocó un bono a 10 años

Grecia dio vía libre, justo un día después de anunciar sus planes de ajuste fiscal y en medio de las protestas populares, a la esperada colocación de deuda a diez años.

La emisión suponía una prueba de fuego para calibrar la confianza de los mercados en el país, y en sólo dos horas las peticiones alcanzaron los 15.500 millones de euros, el triple del importe esperado de colocación.

En lo que va del año, Grecia sólo ha llevado a cabo una emisión de bonos. Tuvo lugar a finales de enero, poco antes de que los temores del mercado sobre la evolución del déficit del país heleno tocara techo. Por entonces logró colocar 8.000 millones de euros a cinco años.

El objetivo, casi mes y medio después, es adjudicar unos 5.000 millones de euros en bonos a diez años. Los primeros datos de la demanda permitieron rebajar las especulaciones sobre el precio final de la operación.

Según fuentes del Ejecutivo griego citadas por Marketwatch, el libro de órdenes se cerró en sólo dos horas al alcanzar unas peticiones por valor de 15.500 millones de euros, el triple del importe esperado de colocación. El interés final de estos títulos podría rondar de esta forma el 6,4 por ciento, según Reuters.

La operación de deuda también es exitosa teniendo en cuenta la desconfianza que reina sobre algunos países europeos (España, Italia, Irlanda) a los que se suma Grecia. Sus déficits fiscales quiebran las normas establecidas para ser parte de la eurozona.
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