Unos tres millones de trabajadores públicos y privados se plegarán hoy a la medida. Se oponen al congelamiento salarial y la suba de impuestos.
Los problemas de Grecia no son sólo financieros. Hoy los sindicatos realizarán un paro general por 24 horas en repudio al plan de ajuste del gobierno. Más de tres millones de trabajadores acatarán la medida. Además de los empleados estatales, trabajadores de hospitales, colegios, universidades, bancos, juzgados, aduanas, medios de comunicación y la industria confirmaron la adhesión. El transporte público sólo funcionará para trasladar a los manifestantes hacia el centro de las principales ciudades. Unos cuatrocientos vuelos fueron cancelados por la huelga. Ayer un gremio bloqueó la entrada de la bolsa de valores de Atenas, que, sin embargo, pudo operar electrónicamente.
Tras el ultimátum emitido por la Unión Europea, Grecia se tuvo que ajustar el cinturón. Para reducir el déficit público (que cuadriplica lo permitido por la UE) y no seguir engrosado la deuda (que alcanza el 113% del PBI), el gobierno heleno tuvo que idear un plan de reestructuración de la economía que alejara el fantasma del default.
El 9 de febrero, en medio de la depresión bursátil, el Ejecutivo helénico anunció un programa de ajuste cuatrienal para su economía que incluye congelamiento salarial, suba de impuestos, suspensión de contrataciones estatales y aumento de la edad de jubilación. Al día siguiente los empleados públicos salieron a las calles a oponerse al ajuste y junto a los sindicatos del sector privado convocaron a un paro general para hoy.
“Les pedimos al Gobierno y a Bruselas que pongan a la gente y sus necesidades por encima de los mercados y las ganancias”, reclamó Stathis Anestis, miembro de la unión de trabajadores del sector privado (GSEE).
Las principales marchas se desarrollarán en el centro de Atenas y en el resto de las grandes ciudades. El paro afectará a todos los medios de transporte (trenes, colectivos, barcos y aviones), pero los trabajadores de los dos primeros garantizaron un servicio mínimo para que los manifestantes lleguen al centro de la capital griega.
Uno de los gremios del sector privado se manifestó en la puerta de la Bolsa de Atenas. Con la consigna “Dejen que la plutocracia pague la crisis”, los trabajadores bloquearon el acceso al edificio. Sin embargo, el mercado operó de manera electrónica.
El día del paro general coincide con la llegada a Atenas de los técnicos de la Unión Europea, del Banco Europeo y del FMI enviados a supervisar la economía helena. El objetivo de la UE es que Grecia reduzca su déficit del 12,7% al 8,7% este año y para eso tiene que mostrar los primeros resultados del ajuste el próximo 16 de marzo. Los expertos deberán constatar que el gobierno esté cuidando las finanzas públicas.
El malestar social también afecta a otros dos integrantes del grupo de los PIGS. En España, los sindicatos realizaron marchas en contra del ajuste laboral impulsado por el presidente Rodríguez Zapatero. En Portugal los empleados públicos convocaron a un paro general para el 4 de marzo en oposición al congelamiento presupuestario.
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