El presidente español, José Luis Rodríguez Zapatero, abrió la reunión de la Cumbre ALC-UE con un discurso sobre el progreso que se produjo en las relaciones entre los dos continentes en la última década, y que los transformaron en "socios globales ante desafíos globales". El anfitrión de la Cumbre y Presidente de turno de la UE, habló sobre la necesidad de sumar esfuerzos y derribar las fronteras que interfieren en el crecimiento económico.
"Vivimos en un mundo cada vez más globalizado, donde la respuesta para la prosperidad se encuentra en la Unión de los esfuerzos, donde la capacidad para el crecimiento económico y de la política social está en la apertura, en la liberación y no en las fronteras", declaró.Zapatero habló también sobre la construcción de una política a favor de la democracia, el Estado de derecho, los derechos humanos y la lucha contra el cambio climático. Reiteró el compromiso europeo en los procesos de reconstrucción de Haití y de Chile, países que sufrieron grandes daños en virtud de una serie de terremotos.
Entre los días 14 y 18, antes del inicio de la Cumbre, Vía Campesina Internacional reunió en Madrid a delegaciones latinoamericanas y europeas, para rechazar los acuerdos comerciales que afectan directamente a los pequeños y medianos productores agrícolas de los dos continentes. Para Vía Campesina, los acuerdos discutidos durante la Cumbre no aportan ningún beneficio a los agricultores.
Los campesinos resaltaron que la política de restitución para la exportación estimula la absurda política de imponer exportaciones europeas. Esto sería una amenaza para la soberanía alimentaria. "Los agricultores y agricultoras de Vía Campesina tienen como prioridad alimentar a nuestros pueblos", afirmaron.
Los únicos beneficiarios del referido acuerdo, según ellos, serían las industrias y transnacionales de distribución y transformación de la leche y los exportadores, y no los agricultores o agricultoras de ALC y la UE.
La delegación de Vía Campesina en Madrid reafirmó que la defensa de la agricultura familiar es común tanto en Europa como en América Latina, y que estos acuerdos de libre comercio destruyen la soberanía alimentaria de los pueblos.
Los sindicatos de América Latina y el Caribe (ALC) y de la Unión Europea (UE) presentaron hoy una declaración conjunta al Ministro de Asuntos Exteriores español, Miguel Ángel Moratinos. La declaración titulada "Por el fomento del empleo, la coalición social y los derechos de los trabajadores en las relaciones entre Europa y América Latina", aprobada el 5 de mayo al final de la 5ª Cumbre Sindical de la ALC-EU, pide que se ponga fin a la ratificación de los Tratados de Libre Comercio (TLC), en virtud de la omisión de las principales reivindicaciones sindicales y de la no participación de la sociedad civil y de los sindicatos en el proceso de negociación.
La declaración sindical aborda también la necesidad de estímulo para la economía mundial y la nueva reglamentación de los mercados financieros, así como la promoción del Programa de Trabajo Decente.
Traducción: Daniel Barrantes - barrantes.daniel@gmail.com
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